Y ya después de muchísimas experiencias en comunidad infantil, pasé a casa de niños y ya hay muchas cosas que sé hacer, tanto de movimiento como de lenguaje, pero hay otras que necesito practicar y practicar, ¡Siempre hay algo nuevo que aprender!
Los movimientos de mi cuerpo cada vez son más variados y precisos:Ya camino bien, también salto, corro, trepo, etc. pero siempre busco nuevos retos, como conseguir caminar por una línea que me encuentro en el patio.
Y como ya no necesito concentrarme tanto en caminar, pues puedo probar otras actividades, como llevar una carretilla y rastrillar:
O puedo hacer varias cosas a la vez, como caminar, llevar una bandeja llena de objetos y hablar.
Ya limpié cristales, pero ahora puedo hacerlo con más precisión y utilizando herramientas nuevas.
Y me puedo hacer cargo de mis cosas, como colgar la chamarra en el perchero; para eso coloco la chamarra en la mesa, le pongo la percha y la cierro; se que así no se caerá.
Pero a veces no es tan fácil. Por suerte siempre hay alguien dispuesto a ayudarme.
Pero no solo eso, practiqué tanto agarrar cosas con mis 3 dedos, haciendo el movimiento de pinza, que ahora puedo hacer muchísimas más cosas:
Y todo esto me permite agarrar un lápiz, pintura, rotulador, etc. y con esto se me abren un mundo de posibilidades.
Y en el lenguaje ya puedo expresar todo lo que quiero, mi opinión, puedo debatir, llegar a acuerdos, preguntar, responder, etc…
Y acabo de hacer un descubrimiento interesantísimo: que las palabras se componen de sonidos, y que cada sonido se puede representar con una letra. Y estas letras las puedo tocar y sentir.
Pasa una mosca;¿Qué sonidos tiene mosca?m-o-s-c-a
¿Y camino? c-a-m-i-n-o
Así que busco las letras que representan estos sonidos.
Y como ya agarro el lápiz, pues a practicar en escribir esto en papel.
Y hay otra cosa interesantísima que he descubierto; las cantidades y sus relaciones. Ahora puedo contar, pero no solo eso, sino que cada número también tiene un símbolo escrito, que también puedo tocar y sentir.
Y las cantidades las puedo relacionar con estos números escritos.
Y contando contando puedo llegar hasta el cien, y más allá: ¿Cuántos números habrá?
Y así poco a poco voy descubriendo y comprendiendo el mundo y sus relaciones. Por ejemplo me interesa América del sur, así que agarro el mapa y cuento cuántos países tiene.
¿Y qué más? Puedo buscar las banderas de cada país, y fotos que me muestren algo de ese país. Esto es lo que descubrí.
Y en todo esto son los sentidos los que me alertan de todo; escucho un avión cuando pasa, veo una mosca cómo se mueve, y disfruto tocando el terciopelo….
Por eso en un momento dado, cuando se escucha un estruendo, miro y veo que a un niño que estaba limpiando su mesa se le cayó un balde con agua al suelo.
Y ahí vamos varios a ayudar. Cada uno agarra una escoba,un trapo o un trapeador y a limpiar. Pero primero nos tenemos que poner de acuerdo; y ahí comienzan los debates.
Y cada uno a lo suyo; a secar la mesa, pasar el trapeador, la otra mesa, etc.
Y esto de escurrir el trapo, no es tan fácil…
Y así seguimos, dale que te pego. Con razón María Montessori dijo que somos ” los trabajadores incansables”
Pero es que cada una de las actividades que hacemos nos llenan por completo, aprendemos con todo nuestro ser. Aprendemos solos y con nuestros compañeros, ya disfrutamos de la compañía unos de otros.